Sólo cuando la muerte ha pasado ante tus ojos aprecias realmente tu vida. Sólo cuando has conocido la soledad valoras la compañía, si alguna vez te has caído, sabes lo valioso que es estar de pie.
Y es muy duro, haber formado parte de la oscuridad, haber sido ella. Que si te han mentido, la verdad aunque cruel te sabe deliciosa. Porque cuando has pasado tantas mañanas rechazando besos que por las noches desperdiciabas, te das cuenta de lo que importa un beso de buenos días.
Que sí, que todos nos hemos caído alguna vez, absolutamente todos hemos conocido la tristeza y hemos acariciado con las yemas de nuestros dedos la locura, la pérdida de control sobre uno mismo.
Esta entrada no va por esas personas que necesitan una motivación para levantarse. Es para ti, quien sea que esté leyendo esto, que caíste una vez pero hoy estás en pie, quiero decirte que ánimo, porque lo difícil no es levantarse, es no volver a caer, pero lo estás haciendo bien, tienes que aguantar, todo pasará, tienes que comprender que cuando has abandonado tu vida durante algún tiempo, es difícil que todo esté como lo dejaste, toca luchar un poco y lo vas a conseguir. No permitas que te digan qué puedes hacer o qué no, jamás, puedes hacer cuando desees, inténtalo, siempre, hay que intentarlo, porque vale la pena hacerlo, aprovecha tu tiempo, recupera el que perdiste. No sé quién serás, pero que sepas que ya te quiero.
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